Última hora sobre la desaparición de Álvaro Prieto: intentó acceder a las vías por una zona prohibida

Pasan las horas y el futbolista cordobés de 18 años Álvaro Prieto continúa en paradero desconocido. Desde el pasado 12 de octubre se le busca la pista en Sevilla, pero sin éxito. Un grupo de voluntarios de Protección Civil y varias ONG’s han peinado la zona de de la avenida de Kansas City, pero no han podido encontrarle. Además, se ha conocido que el joven trató de acceder de nuevo a las vías de la estación de Santa Justa desde el exterior de la misma.

Porque Álvaro Prieto perdió el Avant de las 7:35 horas de la mañana con el que tenía que regresar a casa, a Córdoba, después de pasar una noche de fiesta con amigos en una discoteca de Sevilla. Ante esta situación, el futbolista del Córdoba saltó en primer lugar el control de seguridad para tratar de entrar en el AVE que viajaba hasta Barcelona a las 8:55 horas de la mañana, con parada previa en Córdoba. Álvaro fue identificado y expulsado de las instalaciones.

Después, el joven fue visto intentando acceder de nuevo a las vías de la estación de Santa Justa desde el exterior y haciéndolo por una zona que no es de acceso al público, según la reconstrucción de los hechos ocurridos en la mañana del jueves. En los siguientes días, varios trabajadores de la estación de Santa Justa pudieron verle por el parking de Kansas City, lugar donde han tratado de buscarle en varias ocasiones, pero sin éxito. Los empleados de la estación han reconocido que les sorprendió que Álvaro estuviera en esa zona cuando se trataba de una zona protegida de difícil acceso.

Y es que la última vez que fue visto Álvaro Prieto fue a las 10:30 horas por la zona de Kansas City en dirección hacia Las Huertas. Según ha podido confirmar la ONG SOS Desaparecidos, han sido numerosas las llamadas que han recibido desde muchos puntos de España informando que han podido ver a Álvaro Prieto en diferentes ciudades, incluso en algún tren. No obstante, todas esas opciones se descartan e incluso están dificultando las investigaciones.

Conducta del desaparecido

Para el coordinador de la ONG SOS Desaparecidos en Andalucía, David Guzmán, lo que hace distinto a este caso sobre otros es «la conducta» del desaparecido, porque se trata de «un chaval joven de 18 años, deportista, de élite, buen estudiante, que tiene una relación personal bastante buena», y que no tiene problema alguno con su entorno: «Lo que inquieta es que la voluntad suya de intentar llegar a Córdoba va a cualquier medio», añade.

De hecho, el último contacto con su familia lo tiene a través de un mensaje de WhatsApp que envía a su madre diciéndole que se vuelve de Sevilla a Córdoba, que estaba llegando a la estación, pero «se quedó sin batería en el móvil y no consiguió embarcarse en un tren», sin que el teléfono haya vuelto a estar encendido en ningún momento.

David Guzmán ha dicho que la edad del desaparecido, con 18 años, no tiene influencia alguna en el trabajo de búsqueda, porque «un desaparecido no tiene edad, sino que miramos qué es la persona desaparecida y las circunstancias», y en este caso «viene a Sevilla a reunirse con sus amigos, tiene una fiesta, una fiesta como todos los chavales vienen y tienen sus fiestas, y termina y avisa y su voluntad es el finalizar en su domicilio», sin nada extraño hasta ese punto.